A VUELTAS
CON LAS MACROGRANJAS.
Llevamos ya varios meses oyendo noticias
sobre las macrogranjas, que si una de vacas en Soria, que si una de cerdos en
Cuenca. Que si los ayuntamientos dan el visto bueno, que si no lo dan, que si
los ecologistas están en contra……bueno estos están en contra de todo, de todo
menos de llevarse dinerito de supuestos estudios o que si las organizaciones
agrarias dicen esto o lo otro.
Pero….¿que es una macrogranja?: En principio
son estas explotaciones ganaderas que exceden con mucho la media a la que aquí
nos movemos, aunque hay mucha diferencia entre la anunciada en Soria de vacas
lecheras, y las que están proyectadas o en construcción de cerdos, pues no es
lo mismo 20.000 vacas lecheras que 2000 cerdos. De hecho, viendo los planos de
una de cerdos que constan de unos 3.500 mts cuadrados de naves mi opinión es
que es una granja grande, pero no escandalosamente grande. Hay muchísimas
instalaciones industriales mucho mayores. Pero dicho esto, quiero darles a
ustedes mi opinión como técnico que soy al respecto: Creo que básicamente
existen dos modelos ganaderos en lo referente a la ganadería intensiva o
semi-intensiva, uno basado en explotaciones relativamente pequeñas y otro en el
de las grandes o gigantes. Si yo tengo que elegir entre un modelo de ganaderías
de tipo medio y uno de tipo gigante, elijo evidentemente el de tipo medio Ya
que los problemas creados por una granja demasiado grande me hacen decantarme
por el mismo, estos problemas son la concentración de residuos y del consumo de
recursos en un punto determinado. Pero no podemos obviar, las ventajas de una
explotación grande, pues sería lo mismo que comparar al grupo Opel o Renault
con un señor que en un taller haga coches. De hecho, lo segundo no existe porque
lo primero tiene sus ventajas, aunque también tenga sus inconvenientes. Es por
ello que o bien, optamos por un sistema de ganaderías de tipo medio, que no de
tipo pequeño, limitando la competencia que puedan hacernos macrogranjas de
fuera de España o permitimos la instalación de cualquier tipo de ganadería. Por
qué lo contrario, que sería permitir la entrada de productos procedentes de
grandes granjas y no permitir su instalación aquí nos llevaría al cierre de
todas nuestras explotaciones y a la importación de esos alimentos de sitios
donde serían producidos en macrogranjas y es que a la larga el modelo de
explotación ganadera tiende a ser el mismo que el de la industria del
automóvil.
Por lo tanto, mi opinión que creo sale de
mis conocimientos y del sentido común es que debe de haber un equilibrio entre
rentabilidad, productividad y sostenibilidad, primando siempre que sea cual sea
el modelo productivo que en España se adopte, debe ser el mismo que se les
exija a las importaciones de ese mismo sector.
Caso aparte es el de las críticas a las
macrogranjas, quienes las realizan y por qué. En los últimos años vemos, los que
conocemos el sector que se está incrementando de forma constante las instalaciones
de cría y engorde de cerdos, lo cual puede obedecer a varias razones, primero
medioambientales ya que la concentración de ganaderías de este tipo en
Alemania, Bélgica, Dinamarca u Holanda hacen conveniente trasladar esas
instalaciones a zonas menos pobladas, es decir a Castilla y León o Castilla-La
Mancha, de forma que vemos como en España el censo de reproductoras se ha
incrementado en un 15% en los últimos diez años mientras se mantiene estable o
disminuye en el resto de Europa. Las causas de ello habría que encontrarlas en
la excesiva concentración de ganadería en los países antes citados, pero no serían
de descartar otros factores como los políticos y es que no me veo yo a un
alcalde progre, rodeado de concejales musulmanes o directamente un alcalde musulmán
de Holanda o Bélgica autorizando la instalación de una granja de cerdos en su
término municipal.
En cuanto a
la oposición a la instalación en España de esas granjas, pues por un lado
animalistas que son los anti todo, animalistas que para una recogida de firmas
contra una granja en Soria recogen por ejemplo 1000 firmas en Sevilla. O gente
que después de abandonar su pueblo de cien habitantes quieren que para quince
días que vuelven al año desde una gran ciudad se mueran de hambre los actuales,
y pocos, habitantes de su pueblo. Y es que mucho quejarse de la despoblación y
luego poner trabas para el desarrollo de los pueblos. Por ello si no se quiere
que las granjas no sean ya de 2000 cerdos sino de 20.000 ya saben lo que deben
hacer, parar la globalización por que la globalización mata.
